Chronique médicale, 1 de marzo de 1926

 

Un acto criminal de Maupassant.

 

En su obra, les Tourmentés, el Dr. Raymond Meunier relata el siguiente hecho:

 

Algunos enfermos comportan en su evolución unos accesos impulsivos que pueden hacerlos criminales: es el caso de Guy de Maupassant, matando de un golpe con una bola de billar al enfermo que jugaba con él en el hospital donde estaba internado.

 

Esta es la primera vez, creemos, que se trata este dramático incidente: no se encuentra mencionado nada semejante en ninguna de las obras que han sido dedicadas a Maupassant; del mismo modo, se buscaría en vano la menor alusión a este acto homicida en las numerosas tesis médicas de las que la enfermedad de Maupassant ha sido objeto. Y Dios sabe que se ha escrito sobre esta afección, cuyos síntomas, fases, evolución, manifestaciones y desenlace han sido estudiados y relatados con tal abundancia de detalles que se podría concluir que nada había sido omitido, olvidado o dejado en las sombras.

El barón Albert Lumbroso, en sus Souvenirs sur Maupassant, el antiguo sirviente François Tassart, en el volumen que lleva el mismo título, el doctor alienista Lucien Lagriffe, en el estudio tan documentado de «psicología patológica» que dedicó a la enfermedad del escritor; los ocho o diez médicos especialistas que han publicado trabajos sobre el mismo caso, no han hecho, que sepamos, alusión al acontecimiento señalado por el Dr. Raymond Meunier. Sería pues interesante conocer la referencia sobre la que se ha apoyado el autor de les Tourmentés.

El hecho, en sí mismo, no tiene nada de sorprendente ni extraordinario, pues los accesos de ira son frecuentes en ciertos periodos de la parálisis general. Pero sí puede sorprender la discreción que ha sido observada hasta el momento sobre la aventura en cuestión.

¿Por qué no abrir una investigación sobre este asunto? Treinta años después de la muerte de Maupassant, no hay ningún inconveniente en precisar en qué circunstancias el infortunado escritor, bajo el imperio de la demencia, se convirtió en un homicida.

 

Paul Mathiex.

 

Publicado en Chronique medicale, el 1 de marzo de 1926

 

 

Respuestas a la crónica.

El barón Albert Lumbroso, en sus Souvenirs sur Maupassant, relata en la página 97, según informaciones que le fueron proporcionadas, con motivo de una visita al hospital del Dr. Blanche, que «en los últimos días, Guy de Maupassant había arrojado una bola de billar a la cabeza de otro enfermo». El Sr. Edouard Maynial, en La vie et l’oeuvre de Guy de Maupassant (p. 284) y el Sr. Louis Thomas (La maladie et la mort de Maupassant, nueva edición, pag. 108) han reproducido el incidente como era de esperar. Pero nadie más hasta el momento parece conocer este tema. En ninguna parte, que yo sepa, está dicho que el acto de Maupassant hubiese tenido unas consecuencias tan nefastas. Según una nota de l’Intransigeant del 10 de marzo último, el Sr. Jacques-Emile Blanche, interrogado al respecto, declaró no haber nunca escuchado decir nada de semejante tema. ¿No puede ser que el Dr. Raymond Meunier haya, por imaginación, exagerado el acto de Maupassant hasta convertirlo en un homicida?

 

Dr. A. Guérinot.

 

        XE "Meunier, Raymond" «Esta es la primera vez, dice el Sr. Paul Mathiex, en la Chronique Médicale del 1 de marzo de 1926, a propósito del «acto homicida de Guy de Maupassant», es la primera vez que se plantea este incidente dramático…»

 

No es así, es al menos la tercera vez. Remito a mi excelente colega a:

1º El interesante estudio de Louis Thomas sobre la Maladie et la mort de Maupassant (Bruges, Arthur Herbert, 1906), donde dice, pag 79: «En los últimos días, Maupassant arrojó una bola de billar a la cabeza de otro enfermo…»

2º A la obra de Edouard Maynial: La vie et l’oeuvre de Guy de Maupassant, París, Société du Mercure de France, 1907, pagina 284, el autor informa del mismo hecho en los mismos términos, según los cuenta Lumbroso.

Lo que yo ignoraba, por ejemplo, era que el golpe de la bola de billar hubiese sido mortal.

 

Dr. Mizzoni, Bône.

 

 

Chronique Médicale, 1926

Traducción de José Manuel Ramos González

para http://www.iesxunqueira1.com/maupassant